Así es la Uva Moscatell de la DO Manchuela

La Denominación de Origen (DO) Manchuela es conocida por sus vinos de alta calidad y variedades únicas de uva blanca. Hoy pondremos el foco en la Moscatel, una uva de aroma intensamente floral y sabor dulce, que aporta un toque distintivo a los vinos de la zona.

La uva Moscatel es de origen mediterráneo y ha sido cultivada durante siglos en nuestro país. Sus características más destacadas son su piel gruesa, su forma ovalada y su color dorado. Pero lo que realmente la hace especial es su aroma y sabor únicos, que recuerdan a flores, cítricos y frutas tropicales. La uva Moscatel es perfecta para elaborar vinos dulces y aromáticos, así como vinos secos con notas frutales y especiadas.

Cómo es el vino Moscatel de la DO Manchuela

El vino Moscatel de la DO Manchuela es una verdadera delicia para los amantes de los vinos aromáticos. En el caso de los vinos dulces, se obtienen mediante el proceso de vendimia tardía o mediante el secado de las uvas para concentrar sus azúcares y sabores. 

Estos vinos ofrecen un bouquet cautivador, donde las notas florales y los toques de miel y frutas maduras se entrelazan con elegancia. 

Por otro lado, los vinos secos elaborados con la uva Moscatel presentan una acidez equilibrada y un perfil fresco y vibrante, que resulta ideal para disfrutar durante los días cálidos del verano.

5 maridajes para disfrutar del vino Moscatel

• Mariscos y pescados: Los platos de mariscos y pescados frescos encuentran un aliado excepcional en el vino Moscatel. Su perfil aromático y toques agridulces realzan los sabores del mar, especialmente cuando los platos son acompañados con salsas a base de cítricos o especias.

• Quesos: La combinación de vino Moscatel con quesos de pasta blanda y textura untuosa, como el Brie o el Camembert, es simplemente sublime. La riqueza de sabores y la untuosidad del queso resaltan las notas florales y afrutadas del vino.

• Postres y repostería: El vino Moscatel es el compañero perfecto para postres y repostería. Su dulzura y notas frutales armonizan a la perfección con postres a base de frutas frescas o cítricas, pasteles de crema y tartas de almendras, ofreciendo un final de comida espectacular.

• Comida asiática: La exuberancia del vino Moscatel lo hace un maridaje ideal para la cocina asiática. Combínalo con platos de sushi o curry y experimenta una combinación de sabores fascinante, donde las notas tropicales del vino complementan los sabores intensos y especiados de la comida.

• Comida especiada: El vino Moscatel también se destaca en maridajes con platos condimentados con hierbas aromáticas y especias. En la cocina mediterránea y la india, por ejemplo, su frescura y carácter frutal actúan como un contrapunto delicioso para los sabores especiados.

La uva Moscatel de la DO Manchuela es una joya enológica que brinda vinos llenos de encanto y personalidad.