El cordero es la estrella en la mayor parte de las mesas de los hogares españoles. Su versatilidad y sabor hacen que se convierta en el plato fuerte con el que sorprender a tus invitados. Aquí presentamos cinco formas para poder disfrutar de una carne con un gran valor nutricional.
Cordero asado con tomillo. Quizás el asado sea el más tradicional de los platos de cordero. Lo primero que tenemos que hacer es escoger una buena paletilla de Cordero Manchego lechal con IGP para que esté más tierna. La acompañaremos con unos buenos ingredientes de nuestra tierra en el que predomina el tomillo que cubre nuestros campos y le aportará un punto de aroma y sabor único.
En un vaso de batidora, pondremos un buen chorreón de Aceite de Oliva de La Alcarria con DOP, el tomillo deshojado, unos dientes de Ajos Morados de Las Pedroñeras con IGP, sal, pimienta y un vaso de vino blanco de la DO La Mancha. Con el mejunje obtenido, untaremos generosamente las paletillas.
Las introducimos al horno precalentado a 150 grados con un poco de agua en la bandeja para evitar que se reseque la carne. Lo asaremos durante hora y media vigilando cada 20 minutos para comprobar el estado. Pasado el tiempo, le daremos la vuelta y pintamos de nuevo con nuestra mezcla para introducir en el horno unos 40 minutos más, subiendo la temperatura hasta los 180 grados. Listo para servir y disfrutar de su sabor.
Cordero relleno de jamón, queso y dátiles. Para esta receta pediremos a nuestro carnicero de confianza que nos dé una pierna de Cordero Manchego con IGP deshuesada para rellenar. La preparación es muy sencilla. Extendemos la pieza de carne y cortamos con un cuchillo para que sea homogénea de grosor por todas partes.
Salpimentamos al gusto el interior. Para el relleno lo primero que pondremos será unas lonchas de jamón cocido, unas lonchas finas de Queso Manchego con DOP semicurado para darle un sabor potente pero que no enmascare el cordero. Y culminaremos el relleno con unos dátiles partidos por la mitad.
Envolvemos el conjunto y lo atamos bien con hilo de bramante y volvemos a salpimentar el exterior al gusto. En la bandeja del horno pondremos un vaso de agua y uno de vino tinto IGP Vino de la Tierra de Castilla. En función del tamaño de la pieza, la tendremos entre una hora u hora y media dando la vuelta cada 30 minutos. Para la presentación, se retira el hilo y se pone la pieza entera en una fuente con la salsa resultante aparte para servir al gusto. Trincharla delante de los comensales nos dará un toque sofisticado.
Brochetas de cordero. Una forma distinta de presentar el cordero. Utilizaremos una pierna de Cordero Manchego con IGP deshuesada y partida en dados. Preparamos en un recipiente una mezcla con Aceite de la DOP Campo de Montiel, unos dientes de Ajo Negro de Las Pedroñeras, unas hojas de laurel, un poco de tomillo y romero. Cubrimos la carne y la dejamos macerar unas dos horas.
Elaboramos las brochetas alternando la carne con pimiento rojos, verde y trozos de cebolla. Las disponemos en una fuente, salpimentamos y cubrimos con parte del aceite con el que la hemos macerado. La introducimos en el horno 15 minutos a 220 grados, le damos la vuelta y volvemos a introducir otros 10 minutos. Y listo para llevar al centro de la mesa.
Chuletillas de cordero glaseadas con miel y vino. Las chuletillas de Cordero Manchego con IGP son un manjar sencillo, con un simple golpe de plancha o de brasas puedes sacarle todo el sabor. Pero, en esta ocasión, queremos sorprender a los comensales con formas nuevas.
En un cazo, pondremos un chorreón de Aceite de la DOP Aceite Montes de Toledo, un trozo de jengibre fresco y un diente de Ajo Morado de Las Pedroñeras con IGP, lo doramos a fuego suave y añadimos 60 ml de Vino Tinto de la DO Uclés y llevamos a ebullición para que se evapore el alcohol. Bajamos el fuego y añadimos 60 gr de Miel de La Alcarria con DOP, 20 ml de salsa de soja y una rama de romero cocinando a fuego lento unos minutos para que la salsa se convierta en una especie de caramelo al que podremos añadir un poco de agua si espesa demasiado.
Aparte, doramos las chuletillas a la plancha por ambos lados y después las ponemos en una sartén y añadimos por encima el glaseado a fuego suave para que se bañen bien por todos lados y listas para servir.
Chuletillas Villeroy. Son otra buena opción para presentar las chuletillas de Cordero Manchego con IGP que podremos utilizar tanto de entrante, como de plato principal. Salpimentamos la carne y las freímos en Aceite de Campo de Calatrava con DOP y las dejaremos poco hechas.
Preparamos una bechamel que quede un poco espesa para introducir en ella, cuando esté templada, las chuletas frías para que se les pegue bien la salsa. Las pasamos por huevo batido y pan rallado y las dejamos hasta el momento de volver a servir. Un plato ideal para poder preparar con antelación, e incluso poder congelar, para freírlas en abundante aceite de oliva en pequeñas tandas y con temperatura alta para sacar todo su sabor.